- Los sistemas de inmersión de realidad virtual (RV) permiten el sentido de presencia, aspecto necesario para evocar emociones y facilitar el procesamiento de los temores asociados a las situaciones temidas, pero en un entorno de exposición controlado.
- Se resuelven los problemas a la hora de hacer exposición en imaginación por la dificultad que supone para muchas personas recrear mentalmente situaciones temidas pasadas, futuras o de difícil acceso.
- El 25% de las personas con fobia específica rechaza la exposición real o abandona el tratamiento al resultar demasiado difícil. Con un ambiente virtual es más fácil dar "el primer paso" para enfrentarse a su miedo.
- La experiencia virtual es capaz de generar en la persona las mismas reacciones y emociones que las que experimenta en una situación similar en el mundo real.
- Permite que la persona pueda interactuar con el mundo virtual en tiempo real.
- Permite diseñar "a medida" la jerarquía de exposición, con lo que la persona puede exponerse a prácticamente todas las situaciones posibles.
- Posee un atractivo especial para la actual generación orientada a la tecnología digital.
- Es un eficaz complemento de la exposición real o una alternativa a ésta, especialmente cuando es difícil de realizar por ser demasiado compleja y costosa, p. ej., en el miedo a volar o en el miedo a las alturas.
- Permite repetir y prolongar la misma tarea de exposición en situaciones de difícil acceso una y otra vez sin cambiar sus parámetros. (p. ej., despegar en un avión en un día soleado o lluvioso, con o sin turbulencias, asiento en ventanilla o pasillo, etc.).
- Resulta muy útil para trabajar las situaciones temidas en las que existe riesgo de sufrir ataques pánico, p. ej., en el metro, el avión, ascensores, lugares cerrados, al someterse a técnicas de diagnóstico TAC o Resonancia Magnética Nuclear, etc. En un entorno seguro y graduado se consigue disminuir el riesgo y no reforzar así el miedo ya existente.
- Las tareas de exposición sin salir de la consulta favorece la seguridad, la confidencialidad (al no estar expuesto a los ojos de los demás) y el control total del terapeuta en proponer (previo acuerdo con la persona a tratar) las escenas virtuales de dificultad/amenaza para las que ésta esté realmente preparada, p. ej., quedarse atrapado en un ascensor, altura de los espacios, condiciones climáticas en un vuelo, número de personas, animales, etc,.).
- Permite la maleabilidad, versatilidad y disponibilidad de los entornos virtuales. Se pueden graduar las situaciones según las necesidades y sin esperar a que éstas sucedan en la vida real ampliándose las posibilidades de tratamiento.
Miedo a las sangre: permite hacer un análisis de sangre en cualquier día del año, sin pedir cita previa, pudiendo manipular los parámetros que se estime oportunos y sin salir de la consulta del terapeuta.
Miedo a conducir: permite la exposición a situaciones que son impredecibles o de duración limitada (p. ej., conducción con lluvia, adelantamiento a un camión, etc.).
Miedo a hablar en público: en la exposición real resulta difícil disponer de una audiencia concreta o de un espacio adecuado. Con la RV se accede a distintos escenarios: audiencias, tribunal examinador, entrevista de trabajo o situaciones sociales. Es especialmente adecuada para conducir sesiones de exposición y/o entrenamiento dentro de un contexto seguro y graduado.
Miedo a los animales: se resuelve la dificultad que implica controlar las reacciones de los insectos, crear situaciones específicas o conseguir ciertas especies.
- En el caso del miedo a los animales existe una poderosa alternativa, surgida a lo largo de los últimos años que consiste en utilizar estrategias de exposición basadas en el uso de la Realidad Aumentada (RA). Se trata de una tecnología que permite combinar el mundo real con objetos digitales, con lo que resulta sencillo mostrar objetos tridimensionales superpuestos a situaciones reales. La RA permite presentar de forma controlada y segura distintas especies en la consulta del terapeuta.
- Progresos en menos sesiones, menor tasa de recaídas y/o abandono del tratamiento.